25 - Smetana Trio - Beethoven: Piano Trios

Smetana Trio – Beethoven: Piano Trios

25 - Smetana Trio - Beethoven: Piano Trios
Tapa del disco Beethoven: Piano Trios, del Smetana Trio (2020)

La música

El 2020 fue el año de la plétora publicativa Beethoveniana por excelencia, donde cuanto solista, ensamble u orquesta tuviera al alemán en repertorio, aprovechó para hacerse presente en las bateas digitales conmemorativas del cuarto de milenio.

El Trío Smetana no quiso renunciar a la oportunidad y aprovechó el año para ofrecer su correcta interpretación de una selección de los 8 tríos con piano del compositor (en sí son 7 completos, más un movimiento suelto de un octavo trío recién publicado tras la muerte de Beethoven en 1830).

En este «disco doble» (concepto que en la era de la distribución digital de música empieza a perder sentido con mucha rapidez) la agrupación de cámara más antigua e importante de la República Checa expone a los ya familiares Archiduque (no. 7, op. 97 de 1811) y Geister (no. 5, op. 70, no. 1, de 1808-1809, conocido por ser parte de la banda sonora de Amada Inmortal) con el tercero de los op. 1 (es decir, de las primeras obras que Beethoven reconoció como «de importancia» para asignarles número de opus) y el op. 70, no. 2.

En todos los casos, el conjunto encuentra el balance perfecto en el lenguaje camarístico del compositor y entiende cómo equilibrar la escritura en pos de la comprensión sonora. Allí, cada instrumento, por más que Beethoven los haya tratado con diferencia (estando el piano más presente y al frente en las obras de juventud, y en un rol más equilibrado en las restantes) son puestos a la deferencia de la pluma musical y la limpidez sonora logrando un conjunto de versiones brilloso, con fuerza, ímpetu y calidez. Vibran de forma clara y logran presentar la trama textural de manera precisa.

La elección de la disposición, tradicional en su distribución entre los canales, en conjunto con un sutil trabajo de balance acústico, acompaña a la labor artística del Trío en buscar la sutileza en la música y trabajar con imaginación y certeza las diferencias entre lo dramático, lo melódico, lo lírico y lo intempestivo de los cuatro tríos.

El género del trío con piano no habrá tenido su nacimiento en Beethoven pero, como con gran parte de sus incursiones, fue llevado por él a un grado de perfección hasta ese entonces poco logrado. No sólo optó por modificar la instrumentación y los roles de los integrantes, sino que jugó con las formas, la extensión, la sustitución de sus partes (optando por un scherzo en vez de el por entonces anticuado minué) y la escritura contrapuntística y armónica para lograr un renacer de la forma y un punto de partida de su impronta musical. Esta versión del Trío Smetana no será precisamente “de referencia” pero es un digno exponente, en tiempos modernos, de una certeza comprensiva de estas innovaciones puestas en práctica en un registro merecedor de escucha repetiva y lugar en la discografía cotidiana de cualquier melómano.