13 - L'Impératrice - Tako Tsubo

L’Impératrice – Tako Tsubo

13 - L'Impératrice - Tako Tsubo
Tapa del disco Tako Tsubo, de la banda L’Impératrice.

La banda

L’Impératrice es una banda francesa de pop, disco estilizado y dance creada por el tecladista y compositor Charles de Boisseguin en París en 2012. De Boisseguin, bajo el nombre de L’Impératrice, editó y lanzó de forma independiente el EP homónimo debut ese año, lo que llevó a un acuerdo con el sello independiente microqlima records. La discográfica con sede en París lanzó la continuación del proyecto, el EP Sonate Pacifique, en 2014. Este trabajo solitario creció para incluir al segundo teclista Hagni Gwon, al guitarrista Achille Trocellier, al bajista David Gaugué y al baterista Tom Daveau. 

Para la publicación de su tercer EP en 2015, Odyssée, L’Impératrice contó con la participación de la cantante Flore Benguigui como nuevo miembro estable.

Inspirados por un error de los fans al reproducir el álbum a la velocidad incorrecta, Odyssée fue reeditado en 2016 a menor velocidad bajo el nombre de L’Empereur (Odyssée Slow Version), y luego, con la inclusión de guitarra acústica, violín y violonchelo, bajo el nombre de Odyssée (Version Acoustique) en febrero de 2017, antes de que el cuarto EP Séquences, y su complemento Séquences (Remixes), se publicaran a finales de año. 

En octubre de 2017 la banda lanzó Erreur 404, primer simple del anticipado primer LP, Matahari, que sería publicado por microqlima en 2018.

Entre 2016 y 2019 la banda realizó extensas giras por Francia y el resto de Europa, con participaciones en festivales, radio y televisión. Sus presentaciones en el festival Coachella entre el 9 y 18 de octubre de 2020 fueron suspendidas por la epidemia del Covid-19, obligando a la banda a hacer un «tour mundial» virtual en julio de ese año.

En abril de 2020 L’Impératrice lanzó Fou, simple de su próximo disco, que se dedicó a componer durante ese año. Tako Tsubo, publicado el 26 de marzo de 2021, fue grabado en vivo por la banda.

Este se presenta como un álbum cotidiano y costumbrista, transmitiendo a través de canciones las emociones comunes y humanas del día a día, siendo fieles a su título (el síndrome de «tako tsubo» hace referencia en japonés a «vivir emociones intensas»), y tocando temáticas modernas como la vida al margen de la sociedad, el feminismo y las redes sociales.

El disco

Tako Tsubo fue lanzado el 26 de marzo de 2021 a través del sello microqlima. Previo al lanzamiento, la banda publicó cinco simples (Fou, Voodoo?, Peur des filles, Anomalie bleue y Hématome), claras evidencias de una ruptura frente a Matahari. A diferencia de este, Tako Tsubo presenta un cambio de atmósfera, con más color, siendo Matahari más oscuro y nocturno. Tambié, se nota una estructura de temas diferente a la del primer LP, que seguía un orden verso-estribillo. En Tako Tsubo, L’Impératrice se muestra más libre a la hora de componer.

La artística incluye a L’Imperatrice como conjunto compositor de todos los temas, a Flore Benguigui en voces, a Charles de Boisseguin y Hagni Gwon en teclados, Achille Trocellier en guitarras, David Gaugué en bajo, y Tom Daveau en batería.

La técnica está conformada en producción por L’Impératrice, Neal Pogue (productor de M.I.A., Nelly Furtado, Earth Wind & Fire, Outkast y Nicki Minaj, entre muchos otros) y Renaud Letang (cuyas colaboraciones incluyen aquellas con Manu Chao, Astonvilla, Feist, Franz Ferdinand y Charlotte Gainsbourg, por nombrar sólo unos pocos); Mike Bozzi como ingeniero de mastering; Neal Pogue como ingeniero de mezcla; y Thomas Moulin como ingeniero de sonido.

(Para saber más sobre Tako Tsubo, recomiendo la excelente entrevista a la banda que Diane Theunissen realizó para el sitio Enfnts Terribles)

La música

La enorme y muy bienvenida plétora de influencias de la música pop y disco internacional se vaticina en Tako Tsubo desde su tapa y su nombre.

La primera muestra a un trío de figuras idénticas sin género, vestidas con túnicas de coro, guantes blancos con dedos interconectados por cables, collar de picas doradas, anteojos oscuros y sonrisa macabra. Una de ellas sostiene unas tijeras a punto de cortar uno de los cables.

El arte se acerca al animé depurado en lo más experimental de la cadena MTV de principios de la década de 2000, estilizado, forzado y traído al mainstream de la mano de Æon Flux.

La franja vertical con la información del disco simula tributo y apropiación de las que se encuentran en ediciones japonesas de álbumes internacionales.

Toda esta estética visual no hace más que recordarme a la banda Interstella 5555, conjunto ficcional creado por las grandes mentes de Guy-Manuel de Homem-Christo y Thomas Bangalter para la película de animé inspirada en el segundo disco de Daft Punk, Discovery (2001), co-escrita por el dúo y Leiji Matsumoto: Interstella 5555: The 5tory of the 5ecret 5tar 5ystem. Y esta no es la única influencia que noto de ellos en L’Impératrice.

Pero no es sólo la tapa lo que hace algún tipo de comentario sobre la estética cultural japonesa, sino que el título, además de hacer alusión a ella, vaticina también la temática común de las letras del disco: «tako tsubo» es, literalmente, «trampa de pulpo», y se usa como término para nombrar a una condición cardíaca causada por estrés emocional o a «vivir emociones intensas», siendo descrito coloquialmente como el «síndrome del corazón roto».

Desconociendo el sonido fundacional de L’Impératrice pero dejándome llevar por Tako Tsubo (el disco y sus referencias culturales), encuentro en este álbum una fuertísima amalgama de estilos que es notable en artistas exponentes de ese género sin género que fue más una descripción abarcativa de influencias americanas en la música japonesa de las décadas de 1970 y 1980 como Tatsuro Yamashita, Toshiki Kadomatsu, Midori Hara y Hiroshi Sato. Así como el city pop reunió funk, R&B, disco, jazz fusión, varpowave y boogie en un mismo proceso creativo, Tako Tsubo es todo eso y más.

La impronta principal es la música disco, límpida y depurada, exploratoria y modernizada en un gran trabajo de bases rítmicas de batería y bajo magistrales, junto con un trabajo de sintetizadores único y cercano a Daft Punk, Polo & Pan, Chic, Parcels, Roosevelt y Vulfpeck. Fou y Voodoo? son indiscutiblemente los dos tracks más cercanos a este género, con Anomalie bleue un tercero similar que muta dentro de sí mismo, mientras que Submarine, L’équilibriste y Off to the Side juguetean más con un R&B tan crudo como estilizado. Sea en uno u otro género, cualquier tema tiene un innegable groove perfectamente construido.

Hay una exploratoria temática muy interesante que ondula entre la búsqueda del amor verdadero (Anomalie bleue, un brillante y atrapante primer track que tras una introducción de impronta sonora llamativa, se abre a una base disco derecha de movimiento inevitable), la invasión de las redes sociales en la vida cotidiana y la influencia que tienen sobre nosotros (Hématome, un funk-pop nipón sintetizado con estribillo de sonoridad abierta y dulce, introductorio de un sonido tropical y metales electrónicos cercanos al Plastic Beach de Gorillaz; o el igualmente heterogéneo Submarine, más cercano al girl pop de la década del 2000), y la denuncia de los conceptos estereotipados que el heteropatriarcado misógino tiene sobre el feminismo (en Peur de Filles, track cercano al Thriller de Michael Jackson mezclado con una fusión jazz-funk que deja el giro melódico de su estribillo estructural como una marca indeleble e inolvidable en el oído musical).

La primera mitad de Tako Tsubo es indiscutiblemente la mejor. La más exploratoria, la más firme, la que ahonda en la mayor cantidad de recursos y se construye como un todo formado por partes complementarias. A partir de Souffle au coeur, sin embargo, ese equilibrio empieza a desmadrarse hacia la inestabilidad. Y aunque posee joyas indiscutidas (Voodoo? con su letra juguetona –«Hoy es sábado»– e inevitable influencia daftpunkiana; o Tant d’amour perdu, coral modernizado y brillante que se abre a una parsimonia hip-hopera que no logra sostenerse del todo como track coherente), es una mitad de álbum que se ofrece como conjunto de simples más cercanos al borrador que al producto elegante y terminado que Tako Tsubo incluyó en sus primeros 7 tracks. Si fuera vinilo, Peur des filles sería un gran final a un lado A como contrapartida de todo un lado B mayormente olvidable.

A pesar de esto, lo que hace L’Impératrice en este álbum me resultó increíble. Mejoran aún más un conjunto de géneros cuya premisa fue la estilización no sólo de música pero de moda y estilo de vida y consumo. Es redondo, inesperado, con tracks inolvidables y una estética muy propia que le brinda a la banda todas las herramientas para ser seguidores y herederos de la antorcha musical que otros grandes recientemente dejaron de portar.